Jeanloup Sieff
La maison noire, New York 1964
En mi sueño, la nieve caía- blanquísima - sobre las avenidas de una ciudad inmensa.
Caía bajo la luz incandescente del sol- desde un cielo sin una sola nube de tormenta- como plumas arrancadas a las alas de un ángel gigantesco.
Hacía calor, pero llevaba un largo abrigo negro , que ondeaba tras mis pasos como una sombra.
La ciudad bajo la nieve tenía una belleza de otro mundo.
Yo no podía quedarme : buscaba las señales del camino a casa.
He vuelto al sitio del naufragio.
Nadie salió a recibirme.
Ahora, cuando llega la oscuridad, mi sombra se acuesta sobre la tierra.
Ríos oscuros de las lágrimas, avenidas de sangre, arterias de dolor, fluyendo desde mí se filtran en la turba.
Soy un pájaro que agoniza entre las flores.
Transmutado en magnolia, mi corazón perfuma la noche.
Un viejo post para un sueño recurrente.
22 comentarios:
Un abrazo salvador para tu sueño inquietante.
Y un beso para ti.
y es que hogar y casa, jamas sera la mismo cuantos vivimos en casa pero anhelamos el calor de hogar... la soledad invade el corazon y quiere adueñarse de nustro pensamiento. y cuando esto sucede es momento de volver a nuestro hogar, a nuestro camino.
Bello, poético, y esa transmutación en magnolia...no es la peor de las opciones, pues si nos transformáramos en flores seríamos parte de todo con mayor fluidez. Besos.
Así es...tu corazón perfuma las noches...y me encanta ese perfume.
Bella, magnolias inasibles que sigo entre sonrisas.
que bien se está en casita :))entre amigos y amigas...
te? chocolate, galletitas?
Adorable Siempre***AMIGA
Merece la pena recuperar poemas cuando los sueños perduran.
Sobre todo si son tan evocadores como éste:
nieve, ciudad inmensa, luz, calor, sombra perdida...
Besos.
Ante un sueño perdurable... ¡¡letras!!... Letras de colores para que el sueño no sea inquieto ni tenga bordes oscuros...
Besos
¿Sabías, querida Dalia, que a las noches no les gusta la competencia? No quieren noches más bellas, ni más melancólicas, ni más alunadas, ni más envueltas en sueños que las que ofrecen ellas?
Te arriesgas a que te demanden.
Un beso muy grande
Que bonito Dalia.
Sabes algo? Yo creo que por mas que queramos a veces, el hogar se nos pierde, al menos hablando de paises, ciudades, amigos...
Algunos regresos no son tales, la tristeza de saber que se han perdido con el tiempo los hogares que abandonamos un dia. Y la certeza quizas, de saber hallar uno nuevo donde habitaron las antiguas sonrisas.
Besos mujer poeta.
oh magnolia errante que perfumas y lates...
Besos sobre ese corazón !
Siempre lo supe tu corazón es de magnolia!
Te abrazo mi querida Dalia.
M.
Feliz noche mágica también para ti. Así que hay mucho tráfico? jajaja
Bueno, iré de lenta...
Que nos brille el cielo a tod@s los que amamos esa dimensión de lo posible en vuelos*
Muchos besos y buscaré tu risa y tu perfume entre las estrellas.
Qué sueño helado, nieve y nadie para recibirte, sólo ese caminito rodeado de pastos secos.
Yo quiero (se me antoja) que la nieve deje de caer y que el caminito sea de amapolas :)
Ellas todas saldrían a recibirte con su mejor sonrisa.
No estás sola.
Besos.
Debe ser el mismo sueño recurrente mío, siempre vuelvo al mismo. Al menos no estamos solos, nos tenemos.
Trsitemente lo haz descrito, sentí el frío.
Un abrazo enorme!
Lo mejor es llevarse el hogar dentro de tu cabeza para siempre, así nadie te lo podrá quitar nunca y recordarlo con mucho amor.
Besos y que tengas felices sueños la próxima vez.
Todavía sigue el sueño?
Tienes que descifrarlo.
Besos.
Volvemos a los viejos lugares donde naufragamos pero, como bien dices, ya nadie nos espera allí. Los que sobrevivieron siempre olvidan esos lugares, lo que no lo hicieron.. bueno, esos ya no importan, ¿no?
Descriptivo, bellísimo e inquietante. Los sueños recurrentes acaban siendo muy turbadores. Pero el texto es precioso.
Tu corazón es hermoso como la magnolia y en él está tu hogar, que viaja contigo más allá de los sueños.
Un beso.
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