Perdí mi corazón en el centro de un complejo laberinto y no recuerdo la ruta ni existe un hilo de Ariadna que me guíe. Se comieron las migas los pajaritos y una bruja de dedos largos y huesudos me hunde el índice entre las costillas para ver si estoy a punto y descorazonada irremediablemente.
La vieja se ríe quedamente, sabedora de que mi mal no tiene fin, cazadora de imposibles, solitaria y nómada hasta cuando mis huesos sean polvo mezclado con el viento.
17.10.10
Golpe
La noticia rasgó los días felices
Y por el agujero de la trama
se escurrió la esperanza.
Duelen esos golpes, nunca se olvidan ni el día en que pasó ni la situación en la que te encontrabas, ni tan siquiera la ropa que llevabas puesta. Espero que sea algo recuperable. Un abrazo.
14 comentarios:
Jo.
Me suena a irreversible.
Ojalá que no.
Besos.
Difícil releerlo, su contundencia asusta, son letras punzantes. Besos.
Sentí lo mismo que Toro, como que no hay vuelta atrás. Hay noticias que uno no querría escucar jamás, espero que el tiempo pueda coser ese agujero.
Te dejo un abrazo fuerte.
Malditas esas noticias desesperantes.
Besos.
Normalemente sólo estamos preparados para lo bueno.
Saludos.
Terrible, raspa el alma.
Te abrazo largamente luz de luna.
M.
Irreversible y rotundo... como las noticias de partidas...
La esperanza se escurre, si... pero no desaparece, solo se va a otro lado un rato.
Besos
Terrible ese estado, seguro que el sol volvió a salir...
Como un directo al mentón.
Un beso.
Pues me haces un agujerito, Soplillo mío que no me gustan las tramas así...
Abrazo va!!!!
Me encanta. Me gusta la palabra esperanza y la palabra deseo e ilusion.
Todos parte de la misma flia
besos
Petra
Y vuelvo poruqe estoy por aca y se te extrania siempre.
Todo de golpe. :)
Petra
Duelen esos golpes, nunca se olvidan ni el día en que pasó ni la situación en la que te encontrabas, ni tan siquiera la ropa que llevabas puesta. Espero que sea algo recuperable. Un abrazo.
En estos días tan duros para Argentina, estos versos resuenan especialmente...
Pero la esperanza se queda acá
beso, Liliana
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