En mi camino
entre algarrobos y pinos
ayer
mientras el mar
se desplegaba
abajo y a lo lejos
como una cinta azul
vi una libélula.
Se posó silenciosamente
en una rama seca
Y me dejó admirar
su cuerpo
de un color verde pálido
y sus hermosas alas transparentes.
Me asaltó una extraña sensación
Un déjà vu...
Me pareció volar entre las hojas
Y ser parte de aquello,
como ella.
Las cigarras vibraban
bajo el caliente sol.
Se me ocurrió que tal vez
he muerto muchas veces
y he sido árbol, y cigarra
y libélula
y tal vez mar...
Y he querido volver
para admirarlo todo
en momentos como éste
de afortunada contemplación